Cuando estar enamorada significa sufrir, estamos amando demasiado.
Cuando la mayoría de nuestras conversaciones con amigas intimas son acerca de él, de sus problemas, de sus ideas, de sus sentimientos y cuando casi todas nuestras frases empiezan con "él", estamos amando demasiado.
Cuando disculpamos su mal humor, su mal carácter, su indiferencia o sus desaires como problemas debidos a una niñez infeliz, y tratamos de convertirnos en su psicoterapeuta, estamos amando demasiado.
Cuando leemos un libro de auto ayuda y subrayamos todos los pasajes que lo ayudaran a él, estamos amando demasiado.
Cuando no nos gustan muchas de sus conductas, valores y características básicas, pero las soportamos en la idea de que si tan solo fuéramos lo suficientemente atractivas y cariñosas, el querría cambiar por nosotras, estamos amando demasiado.
Cuando nuestra relación perjudica nuestro bienestar emocional, e incluso quizá hasta nuestra salud e integridad física, sin duda estamos amando demasiado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario